Reglamento de tránsito, ¿qué es y cómo aplica en mí?

Conoce lo esencial sobre el Reglamento de Tránsito

Ya sea que lo hagas a pie o en algún vehículo, sabemos que pasear por las grandes ciudades no es fácil, motivo por el que existe el Reglamento de Tránsito. No importa si eres conductor, pasajero, peatón o ciclista, siguiendo algunas cuantas normas garantizarás una mejor circulación y coexistencia entre todos.

A continuación te explicaremos un poco mejor en qué consiste este reglamento, así como otros aspectos básicos para que tu circulación por las calles sea más segura y evites todo tipo de sanciones.

Así que abróchate el cinturón y acompáñanos por este recorrido.

¿Qué es el reglamento de tránsito?

Un reglamento de tránsito, como cualquier otro reglamento, tiene el objetivo de mejorar la convivencia, respetar los derechos y establecer obligaciones, todo esto, dependiendo el contexto y rubro al que se apliquen dichas normas.

En vialidad, un reglamento de tránsito tiene por objeto establecer las normas a las que deberá sujetarse el tránsito de peatones y de vehículos en vías de jurisdicción estatal y federal, cuya vigilancia y control convengan con la Federación.

Aunque prácticamente cualquier estado tiene su reglamento, puede decirse que las leyes básicas son aplicables a todo el territorio nacional. Más adelante daremos algunos ejemplos.

¿Para qué sirve el reglamento de tránsito?

Este conjunto de normas viales, junto con las señales de tránsito, busca que todos aquellos que circulen por la calle, ya sea con un vehículo motorizado o no, o transite por la banqueta, convivan de una mejor manera y cuenten con mayor seguridad a la hora de hacerlo.

Por ello, existen ciertas normas que tanto peatones como automovilistas, ciclistas y motociclistas deben seguir en la vía pública.

Estas reglas determinan las condiciones de circulación legales y de seguridad a las que deben ajustarse los vehículos y sus conductores (incluidos ciclistas y vehículos no motorizados). Pero, además, establece los esquemas de sanciones monetarias y legislativos a los que un infractor se hace acreedor en caso de romper alguna de estas normas.

En pocas palabras, se puede decir que el reglamento de tránsito sirve para regular la circulación de peatones y vehículos; esto, mientras cumplen una serie de normas que garanticen su circulación de forma segura y en armonía con los demás.

El reglamento de tránsito debe apoyar en la circulación de peatones y automovilistas por igual.

¿A quiénes aplica el reglamento de tránsito?

Como bien mencionamos, busca crear una mejor circulación entre peatones y conductores de cualquier clase de vehículo. Por esta razón, las disposiciones de este reglamento son aplicables a peatones, ciclistas, conductores, pasajeros y propietarios de cualquier tipo de vehículo matriculado en el país o el extranjero que circule en el territorio de la Ciudad de México.

Lo anterior quiere decir que, no importa si se trata de un vehículo (o peatón) extranjero; mientras circule por el territorio nacional, debe apegarse a las normas e infracciones dictadas por el reglamento de tránsito estatal o federal.

¿Qué se necesita para conducir un vehículo?

Según lo establecido en el Diario Oficial de la Federación, en su reforma al Reglamento de Tránsito en Carreteras Federales, para conducir un vehículo de motor es necesario:

  • Estar en pleno uso de facultades físicas y mentales.
  • Portar la licencia vigente correspondiente o documento que la supla y ampare precisamente la operación del vehículo y servicio de que se trate.
  • Para operar o conducir un vehículo de motor, el conductor deberá utilizar el cinturón de seguridad.
  • Para que un vehículo automotor, remolcado o de propulsión humana, pueda transitar en las vías públicas, será necesario que esté provisto de placas debidamente colocadas y claramente legibles, tarjeta de circulación y calcomanía vigentes, expedidas por la autoridad de tránsito que corresponda o documento que haga sus veces.

En cuanto a este último punto, existen algunos excepciones, como lo son:

  • Vehículos agrícolas que transiten eventualmente, pues su principal uso es en el campo.
  • Equipo móvil especial que transite eventualmente.
  • Cualquier vehículo que sea propulsado exclusivamente por energía eléctrica obtenida de conductores externos.
  • Vehículos de las fuerzas armadas del País.
  • Motocicletas y bicicletas que no necesitan calcomanía.
Entre las funciones de un policía de tránsito, está el apoyar para crear un mejor flujo del tráfico.

¿A qué vehículos aplica el reglamento de tránsito?

Ahora que sabes lo necesario para conducir un vehículo, así como ciertas excepciones para la circulación de algunos, quizá te preguntes específicamente para cuáles vehículos es aplicable el reglamento. A continuación lo aclaramos.

Los vehículos automotores se clasifican en uso particular, sin fines de lucro; comercial, destinados a cierto servicio de carga o negociación mercantil; y de uso público, con tarifa autorizada para el cobro de sus servicios a los pasajeros.

Todos estos vehículos se clasifican en las modalidades de: alquiler, pasajeros, carga general y especializada, turismo y de servicio social (ambulancias y demás).

Si deseas saber más detalles y especificaciones, te invitamos a dar click aquí.

¿Quién puede infraccionarme y cuáles son sus funciones?

Una de las dudas más comunes es qué agentes policiales pueden o no infraccionarte o amonestarte en caso de romper una regla de tránsito. Ante esta pregunta,  la respuesta es sencilla: sólo los agentes de tránsito (Policía de Tránsito) están facultados para expedirte una multa en caso de que la amerites.

De acuerdo con el artículo 4, I Bis del reglamento, el agente facultado para infraccionar es el “integrante de la Policía de Control de Tránsito, autorizada para expedir y firmar las boletas de sanción, con motivo de infracciones a las disposiciones en materia de tránsito, captadas mediante sistemas tecnológicos y equipos electrónicos portátiles”.

Entre otras de sus obligaciones y funciones están: portar de manera visible su gáfete de identificación  con su nombre completo, grado y adscripción; aligerar el tránsito de vehículos; auxiliar a todos los conductores cuyos vehículos presenten una falla mecánica o ponchadura; informar de obstáculos en vialidades y ayudar a otros cuerpos policíacos en sus labores.

En lo respectivo a las sanciones y amonestaciones, pueden llamarles severamente la atención a los peatones que no respeten las señales de tránsito; remitir al Ministerio Público a los conductores de vehículos que manejen en estado de ebriedad o hayan cometido algún otro delito; retirar las placas que no estén vigentes, entre otras.

Para mayores detalles, puedes consultar todos los apartados aquí.

Únicamente un policía de tránsito bien identificado puede infraccionarte.
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