En una de nuestras rodadas anteriores, te comentamos que una ciclopista sirve, entre muchas otras razones, para brindarle seguridad al ciclista en su camino, pero, entonces, vale preguntarse, ¿cómo podemos implementar ciclovías seguras?
Y es que, a fin de cuentas, no basta con construir cientos o miles de kilómetros de infraestructura ciclista si no se brinda la seguridad necesaria para circular sobre ellas.
Después de todo, otro de los objetivos de las ciclopistas es que, mediante los ciclistas que ya circulan en estas, influir en otras personas para que también las usen. Esto no será posible si, en vez de mirar que los usuarios están protegidos en estas rutas, sufren atropellos y otros accidentes que ponen en riesgo sus vidas.
Más allá de llenar las ciudades de ciclovías, se debe garantizar el regreso con bien de todos sus usuarios. Por ello, en el paseo de hoy, vamos a hablar un poco sobre cómo podemos implementar ciclovías seguras.
Ajusta bien tu casco y aférrate al manubrio, porque ya vamos de salida.
Espacios exclusivos para construir ciclovías seguras
Una ciclopista puede crearse sobre cualquier carril de una vía pública o una vía independiente que permita el tránsito de bicicletas. No obstante, no en todas las vías puede crearse una ciclovía.
Lo mejor que se debe hacer para determinar la viabilidad o no de una ciclovía sobre determinada ruta, es a través de un estudio de movilidad ciclista. Los resultados que se obtengan del mismo determinarán si el tramo elegido es óptimo o no para llevar a cabo el proyecto.
Algunos factores de los que depende su construcción son: la creación de una ciclovía emergente, el aumento de viajes ciclistas sobre la misa, la demanda de la gente para que se construya de forma permanente, entre otros aspectos.
Sin embargo, una vez que una o varias posibles rutas demuestran su viabilidad y son construidas, el asunto no termina allí. El siguiente paso es, ahora sí, será determinar la forma en que se implementen para crear ciclovías seguras.
¿Cómo se pueden implementar las ciclovías seguras?
La mejor forma de conseguir ciclovías seguras, es que estas se encuentren protegidas y claramente marcadas, ya sea mediante barreras físicas o visuales. De esta manera, el ciclista contará con un espacio exclusivo para él.
¿Cómo se tienen que diseñar y construir para que sean seguras?
Si bien construir ciclovías seguras no requiere de tantos elementos y gastos como lo es construir infraestructura automovilista, sí requieren de una buena planeación.
Existen dos claves para que las ciclovías sean efectivas y seguras: un diseño estratégico de las calles y avenidas; y el uso de dispositivos visibles de seguridad vial. A estos últimos son a los que nos referimos anteriormente como barreras físicas o visuales.
¿Cuáles son las barreras que se necesitan para crearlas?
Como bien dijimos, existen dos tipos: físicas y visuales. Cada una de ellas se implementa dependiendo del tipo de ciclovía para los que estén destinados.
Las barreras visuales son los canalizadores y delimitadores plásticos, también conocidos como confibicis. Son fáciles de colocar y también rentables por su bajo costo. Estos deben contar con materiales reflejantes para que sean visibles en todo momento del día y la noche.
Otras barreras son las señalizaciones de tránsito. Funcionan como una herramienta que, como su nombre lo dice, señaliza la existencia de ciclovías. Claro, también marcan otras estructuras, como paradas de autobuses, retornos, cambios de carril, etc.
Estas señales deben ser totalmente visibles y llamativas. Su fin es comunicar a los automovilistas, desde la distancia, la existencia de estas infraestructuras para que tomen sus precauciones cuando circulen cerca de ellas.
En cuanto a las barreras visuales, estas se aplican, sobre todo, en el pavimento. Se trata de pintura reflejante que delimita el carril de las ciclovías del de los automóviles. Además de agregar materiales que sirven como antiderrapantes y delimitantes, se les puede agregar simbología y leyendas.
Entre esta simbología está el de una bicicleta que indique el uso exclusivo para vehículos no motorizados. También, se puede agregar la leyenda “Bus bici” para marcar aquellos carriles por los que, efectivamente, puede circular tanto el transporte público como las bicicletas.
¿Cuáles son los tipos de ciclovías seguras?
En esencia, existen dos tipos de ciclovías seguras. La segregada y no segregada. La primera de ellas se encuentra separada de la carretera o calle. La segunda se integra junto con la calle.
Dependiendo de la vialidad donde se encuentren, del flujo de autos y bicicletas en horas pico, se decide si implementar barreras físicas y/o visuales.
Además, entre estos dos tipos de ciclopistas también se derivan diversos tipos de ciclovías que puedes conocer aquí. Cada una tiene una función e, incluso, pueden ser vías compartidas con el peatón.
Estas son las maneras en las que se puede implementar ciclovías seguras. Sin embargo, ya sea con barreras o sin barreras, la seguridad del ciclista, peatón y conductor, dependerá demasiado de la cultura vial que tengamos todos.